sábado, 17 de mayo de 2008

XL

Plenitud de conciencia
Lejos la ciencia inerte
Soy aquél que nunca ha dicho miedo
Aquél que busca las estrellas

Navegar, navegar, les digo
Es tener conciencia panorámica

Alejados los circuitos
La bisutería del quirófano
Esa llama que llamamos limbo

Todo converge y se conecta

El ayer el mañana son una misma cosa
El hoy se parte en mil pedazos

Pasado o futuro, qué importa

Cuando se está despierto
No se pierde tiempo en esas cosas

Conciencia plena
Un nuevo mundo cerca
Lanzas libros leones
Casas velas aeroplanos
Docena de cruces como apóstoles
Haciéndose ceniza en medio de la euforia

Mártir, resiste la caricia
Mártir, resiste al apego

Olvida, olvida, olvida

Tres personas una esencia
Pero puedo desligarme

La magia resucita
Entre los irredentos

Palabras, palabras
¿Pero quién es el que vive?
¿Acaso alcanza el sufrimiento?

Pero ahora el aire es luminoso
El campo azul, el Cielo abierto,
Un esqueleto vestido de desierto
El metal atravesando las hojas
El triunfo del silencio

Plenitud o inconciencia
Conciencia inconsciente la armonía
Mártir, resiste la nostalgia
Mártir, resiste la belleza

Son amplias y suaves
Las lápidas de las musas

Callen, callen los que ignoran
Y aléjense los sabihondos

Ahora veo
Amplio valle de inmundicia
Ángeles comidos por chacales
Zafiros en el barro
Eruditos en las tumbas

Rueda el trípode naranja
Sacudido por los dioses en su ira;
Ignoro si rodarán vuestras cabezas,
Pido al menos rueden tras haber leído

Ay de vosotros los violentos los cobardes
Muertos y sonámbulos

Pero habrá justicia

Mártir, resiste.

David Alberto Campos Vargas, Nuevo Orden, 2007

No hay comentarios: